20 | 03 | 2023 _ por Jorge Cortés
El compositor y fundador de Inverness sorprende lanzando un íntimo trabajo solista compuesto durante los claustros que dejó la recién pasada pandemia.
A las 23:59 del día sábado 12 de marzo la cuenta de Instagram del compositor Rodrigo Jarque publicó el siguiente mensaje (sic): A la mierda. Ahí está el puto disco. Ya, que se vaya antes de que me olvide de él. No tengo tiempo para pensar en cómo hacer que llegue a ustedes de manera efectiva, así que mejor mal que nunca. Link en mi bio.
Esa sería toda la campaña de lanzamiento de su último esfuerzo solista llamado Nenúfares, una producción de cinco canciones en la que brilla la instrumentación acústica, una cálida voz y mucha melancolía. También resalta el hecho de que no haya tenido campaña de promoción además de la súbita publicación en su cuenta, pero quizás si llegó efectivamente a sus auditores, pero no solo efectivamente, también afectivamente, ya que su trabajo puede escucharse íntegramente vía Bandcamp de manera libre.
El tono general del lanzamiento se mueve entre las sensaciones melancólicas y lo sombrío de la perspectiva nocturna del encierro pandémico. Nenúfares fue grabado en la casa del compositor, durante las noches, contando solo con los sistemas de grabación que tenía a mano, lo cual también gana puntos por autogestión y autoproducción.
El mismo Rodrigo Jarque define las inspiraciones de este mini álbum como “Estas canciones están inspiradas en Chile y sus movimientos telúricos tanto geográficos como espirituales; en la muerte de mi padre; en la lejanía geográfica y espiritual con personas que quiero; en el amor de mi vida y, por supuesto, en mis hijes y sus mundos secretos”. Al escuchar el disco por primera de vez la carga emotiva conecta un gancho brutal directo al alma que obliga a escuchar las canciones y las historias que cuenta desde su primer track, In Spirals, que con su arpegio indie folk de corte norte americano y la sentimental voz de Rodrigo, hilvanan una onírica atmosfera que perfectamente puede ser una canción de cuna para el niño interior que cada persona lleva dentro. A continuación, aparece Infierno & paraíso, la única canción cantada en español de todo el disco. Un track en base a un ritmo de piano cansino con algunos elementos electroacústicos para acompañar la atmosfera triste y nostálgica que sirven de impulso a un estribillo que canta “espérame un poco más ya voy directo a tus brazos”.
Main destroyer marca la mitad del relato discográfico de Rodrigo Jarque, quizás el único tema del mini álbum que tiene elementos sutiles de una banda de rock que hacen de colchón musical al elegante falsete lírico que de vez en cuando se asoma. Por otro lado, también aparece The howling trees, una canción que cuenta con baterías y cuerdas sintetizadas que acompañan una lúgubre progresión armónica en piano que no tiene absolutamente nada que envidiarle a las composiciones en piano de Thom Yorke. Finalmente, el disco presenta The estructure of existense, una canción algo más esperanzadora con elementos rítmicos y melódicos que embellecen cada segundo de la obra y que la convierten en una carta de amor al pop folk más íntimo y suave.
El trabajo musical de Rodrigo Jarque es ampliamente reconocido en su público por construir bellos contrastes en sus canciones, haciendo convivir perfectamente guitarras frenéticas y saturadas con dulces metalofonos, sin embargo, en Nenúfares, Rodrigo apuesta por exponer sus aprensiones y miedos sin distorsiones a un público mucha más íntimo, que no necesariamente es el mismo que el de Inverness, su nave nodriza. Este lanzamiento puede interpretarse como un abrazo de confianza entre el compositor y su audiencia, como diciendo “mira, esto no se lo muestro a todos, esto es parte de mí, es un frágil fragmento de lo que guardo en el bolsillo más sensible de mis emociones y que dejo escapar en un suspiro interno de vez en cuando”. Es casi como una invitación a conocer a Rodrigo Jarque desde su ángulo más sintiente, una invitación que todo oyente debería aceptar.