23 | 01 | 2023 por Matías Muñoz - fotos por Marco Avilez y Sebastián Arriagada
Inverness es una de esas bandas de oficio, trayectoria, talento y un puñado de canciones que han vivido entre recuerdos y memoria colectiva. Sin embargo, su bajo perfil y la falta de oportunidades en nuestro país termina por frenar los entusiasmos y las intenciones cuando 15 años en el ruedo empiezan a pesar. Así como se autodefinen, Inverness son una anomalía, pero esta falla en la matriz de la industria y al margen de los mercados y las pautas del momento se encargó de hacerlos orbitar en torno a algo mucho más grande. Desde la fundación del sello LeRockPsicophonique hasta todo el trabajo colaborativo que ha significado inspirar, aconsejar y acompañar a bandas.
Aún así, el grupo ha mantenido su estilo y no ha transado en la búsqueda de simplemente hacer música. Desde "Iluminaciones" (2009) hasta "Después de Mañana" (2016) la banda pasó por diversas formaciones y una nutrida agenda en vivo. Pero durante los últimos y acontecidos años, la frecuencia de shows disminuyó tanto así que ver a Inverness en vivo es una especie de acontecimiento. Aún activos y con formación original más el multifacético José Tomás Molina, la banda celebró hace unos meses los 10 años de "Fuegos Distantes" y no fue hasta ahora que volvieron a presentarse para dar inicio a la Gira Distante, que los tendrá recorriendo diversas ciudades del país.
La íntima sala SCD de Bellavista es uno de esos lugares perfectos para disfrutar de la experiencia Inverness. Y es que la banda, ahora dotada de dos baterías gracias al regreso de Rodrigo Soto y Ángelo Agurto en bajo, logró juntar generaciones, estilos y etapas en lo que pareciera ser un extraño pero nuevo ciclo del grupo. Esa potencia se definió y maduró cuando sonaron los primeros acordes de "Anubis" y "Orbital", los nuevos pero viejos adelantos de su próximo disco. De sonoridad más oscura que lo anterior, Inverness se sumerge en influencias más ligadas al Radiohead del "Hail To The Thief" y se desacopla de las texturas más centradas al shoegaze. Le restan atmósfera y le suman más ritmo y argumento.
Con la sala a toda capacidad, desfilaron varias canciones reconocidas del grupo como "Distant Early Fires", "Nubes" o "Mundos Suspendidos", que recuperaron la esencia inicial de balada y depositaron un interludio de calma y apreciación, sobre todo en la cinematográfica "Nubes", dedicada al director Matías Bize quien estaba entre los asistentes. A esta jornada de dedicatorias también se sumaron invitados, como Pepa Hidalgo quien acompañó en las voces de "Respira" y que ha sido además compañía recurrente de la banda para esta canción, grabada originalmente con Mariela Espinosa, de la banda ecuatoriana Munn. Hidalgo demuestra con su rango y desplante un aporte total para la solidez del tema gracias a su voz inspirada en muchos estilos como el r&b y un registro que se acopla a la banda.
Uno de los momentos altos de la jornada estuvo a cargo del estreno de "Territorio", que en el mismo plano de "Continental" u "Obscvr", los adelantos de "La Piedad de los Paisajes", su nuevo disco, transitan entre argumentos mucho más oscuros y densos. Eso, le sentó de maravilla al invitado estelar Carlos Cabezas, que acompañó a la banda en la primera interpretación en vivo del single. Con su característico timbre y desplante, el mítico líder de Electrodomésticos sólo necesitó de unos minutos para apoderarse del espacio y qué bien se integró con lo nuevo que propone el grupo. Ese aire inconfundible de su voz y el canto que aportó en varios pasajes de la canción llenaron de emoción y color uno de los mejores adelantos del grupo. Así, la banda terminaba de coronar una noche redonda, logrando juntar experiencia sobre el escenario. Hacia el final sólo quedaba repasar más hits y la emotiva presentación de "Obscvr" junto a Marcelo Sanhueza (director del galardonado videoclip del single).
Sin mayores contratiempos, salvo algunas fricciones entre las dos baterías y un bajo poco claro a ratos, la propuesta final de Inverness se veía con más sinceridad y dominio que nunca. Eso pareciera plasmarse en lo que están trabajando en el estudio, cuyos adelantos han dejado una grata sensación. Musical y técnicamente la banda propone un murallón sonoro que es fácil de atravesar; pareciera denso al inicio pero luego se vuelve sumamente amigable. En vivo, la calidez de cada uno de los instrumentos permite apreciarlo y diseccionarlo, logrando con el tiempo madurar su sonido. La decisión de enfrentarse a dos baterías, secuencias y programaciones mediante, además de los trazos de José Tomás Molina y el cruce de la voz de Rodrigo Jarque con sus arranques de shoegaze en guitarra es una de las mejores versiones de la banda. Puliendo o manteniendo esa estructura, los shows del grupo podrían ser menos esporádicos.
Si Inverness ha logrado mantenerse en la escena sin contratiempos es gracias a esa saludable red que ha formado donde la cooperación y el trabajo en equipo rinde y da frutos. El trabajo silencioso de algunos y el visible de otros hace que proyectos tan notables y sólidos puedan mantenerse, además de sostener el arduo trabajo de quienes decidieron formar una banda por ahí en 2008.
*Inverness continúa la Gira Distante presentándose el próximo viernes 27/01 en Valparaíso. Detalles aquí.